¿Retención de líquidos: qué tomar para evitarla y sentirse como en una nube?

Te ponemos en situación: te miras en el espejo y notas tu cara más hinchada, te pones los zapatos y te preguntas cómo es que se hayan encogido, te pones los vaqueros y no entiendes por qué se cierran con tanta dificultad si hace apenas unos días te iban de lujo. Te desvelamos el misterio: probablemente estás sufriendo los desagradables efectos de la retención de líquidos.

Por supuesto no tienes por qué sentir todas las molestias a la vez, pero la retención de líquidos o edema se produce cuando alguna o varias partes del organismo incrementan su volumen a raíz de un exceso de líquidos retenidos entre las células. Los más afectados suelen ser los pies y las piernas.

Por este motivo hoy nos hemos dispuesto a contarte todo lo que rodea la retención hídrica: por qué ocurre, cómo saber si realmente retienes líquidos y cómo combatirla con remedios naturales y otros tips.

Vamos allá…

¿CÓMO SABER SI RETIENES LÍQUIDOS? 

Aunque te sorprenda la poca sofisticación del método que te sugerimos a continuación, debes saber que es una de las formas más usadas para determinar si la hinchazón de una zona se debe a retención hídrica o no. Así que, si tienes dudas, presiona la zona en cuestión con el pulgar durante unos 30 segundos. Si al levantar el dedo la parte presionada se mantiene marcada, la respuesta es sí, casi con total seguridad sufres retención de líquidos.

via GIPHY

¿Y CUÁLES SON LAS CAUSAS DE LA RETENCIÓN DE LÍQUIDOS? 

La retención hídrica puede llegar a ser un gran incordio en el día a día, pero la buena noticia es que en la mayoría de los casos no es producida por algún problema médico, sino por una combinación de malos hábitos. En todo caso si crees que llevas un estilo de vida ejemplar y aun así retienes líquidos, lo mejor sería consultar a un profesional de la salud.

Dicho esto, entre los principales culpables para que tus tobillos aumenten su volumen están:

  1. LA SAL: sin duda la sal es el principal enemigo de unos tobillos esbeltos. Y cuando decimos sal, no nos referimos solo a la sal que usas para sazonar tus platos, sino también a todos los alimentos curados, ahumados y en salazón como el jamón, el salmón ahumado, las aceitunas, los quesos curados y todos estos aperitivos sabrosos que usan sal en grandes cantidades.
  2. VIDA SEDENTARIA: no realizar actividad física o no lo suficiente puede contribuir a la retención hídrica.
  3. BEBER POCO: no ingerir suficientes líquidos curiosamente es otra de las causas que producen la retención hídrica.
  4. ESTAR DE PIE O SENTADO: mantenerse durante mucho tiempo en la misma posición es otro de los factores que influyen en la acumulación de líquidos.
  5. ALGUNOS MEDICAMENTOS: si tomas algún fármaco y crees que este puede ser el responsable de tu hinchazón, consulta a tu médico.

Y ENTONCES, ¿QUÉ HAY QUE TOMAR Y HACER PARA EVITAR LA RETENCIÓN DE LÍQUIDOS?

1. REDUCE (AL MÁXIMO) LA SAL

Si la sal es el enemigo número uno, obviamente lo primero que hay que hacer es intentar a eliminarla. Para que nos vamos a mentir, al principio te costará, los platos te parecerán insípidos, pero poco a poco te acostumbrarás y tu cuerpo te lo agradecerá. Para que el cambio sea más llevadero puedes sustituir la sal por hierbas aromáticas como el orégano, el romero, el perejil o las que más te gusten.

2. INCLUYE ALIMENTOS CON POTASIO

El aguacate, el plátano, las acelgas o las patatas tienen un alto contenido de potasio que ayuda a contrarrestar el efecto acumulativo de la sal y además favorece el equilibrio hídrico del cuerpo.

via GIPHY

3. BEBE…Y MUCHO

Suena bastante irónico que para eliminar líquidos hay que tomar líquidos, pero cuanto más líquido se ingiere más líquido (orina) se irá produciendo. Con la eliminación de orina se eliminarán y las posibles toxinas presentes en la misma, así como el exceso de líquidos del organismo. Por otro lado, no beber suficiente agua puede inducir al cuerpo a entrar en “modo de reserva” y empezar a acumular agua en los tejidos. 

Así que esfuérzate a beber al menos 1,5l o 2l de líquidos al día. Puede ser agua, infusiones, caldos y cremas de verduras (bajas en sal). Si te cuesta tomar el agua puedes prepararte agua infusionada. Es decir, agua a la que se ha añadido frutas, hortalizas o especias que le transfieren sus aromas y sabores, como, por ejemplo, la de pepino, jengibre y limón.

4. INCLUYE ALIMENTOS CON EFECTO “DRENANTE”

Existen algunos alimentos que, aunque no desinflen tus tobillos hinchados como por arte de magia, sí por su efecto diurético pueden ser una excelente ayuda para eliminar los líquidos retenidos. Unos de los alimentos con acción diurética más conocidos son la piña, el apio, el pepino, la sandía, el melón, los espárragos, el calabacín y la alcachofa.

5. TOMA INFUSIONES Y PREPARADOS DE PLANTAS CON EFECTO DIURÉTICO

Las infusiones de plantas o preparados naturales son, sin duda, una de las opciones más usadas para combatir la retención de líquidos y los pies hinchados. Entre ellas, la cola de caballo es, con total seguridad, la reina de los diuréticos. Sin embargo, la yerba mate, el higo chumbo, el té verde y el castaño de indias son otras plantas con un súper poder sobre la diuresis. Y por supuesto, no hay que olvidarse de la alcachofa, el superalimento depurativo por excelencia, que ayuda a mejorar la función del hígado, uno de los principales responsables para que el cuerpo funcione correctamente. El uso de estas plantas ayuda a eliminar los líquidos en exceso y por este motivo casi todas forman parte de nuestro fabuloso elixir drenante Magrifit Detox.

via GIPHY

6. MUÉVETE A BUEN RITMO

Ya ha quedado claro que, para estar bien, hay que mover el cuerpo. Para liberarse de la retención de líquidos también. Además, en este caso lo ideal sería que en tu rutina de ejercicios prevalezcan los de tipo cardio (correr, saltar, bailar). Por supuesto, no tienes que excluir de tu plan los ejercicios de fuerza o localizados, pero intenta a hacer al menos 20 minutos de ejercicios cardio.

También evita pasar mucho tiempo en la misma posición de pie, con las piernas cruzadas o sentada.

7. PROBAR CON UN DRENAJE LINFÁTICO

El drenaje linfático es un masaje específico para reducir el exceso de líquidos en el cuerpo. Te lo puedes hacer sola (existen un montón de tutoriales), pero si quieres aprovechar al máximo las bondades de este tratamiento, te recomendamos que al menos al principio acudas a un profesional

Así que ya sabes: si te sientes hinchada haz la prueba del pulgar. Y sea cual sea el resultado, seguir estos tips siempre te vendrá genial.